Las vías pecuarias de la Comunidad de Madrid se vuelven a convertir en mera propaganda institucional
- Primero con el Proyecto Arco Verde y ahora con el llamado Plan Recorre, la Comunidad de Madrid utiliza la Red de Vías Pecuarias sin afrontar las necesidades y problemas que la aquejan.
- Ecologistas en Acción lamenta que los recursos destinados a ambos proyectos no se dirijan directamente a recuperar el maltrecho patrimonio pecuario, del que ya ha desaparecido de forma irreversible el 38 %, y se destinen a vacuos proyectos cosméticos.
Madrid, 10 de marzo de 2021
A finales de 2020, la Consejería de Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Sostenibilidad anunciaba el inicio de las obras del Proyecto Arco Verde, una red de caminos y sendas que pretende conectar espacios naturales utilizando caminos públicos y vías pecuarias. Recientemente se ha presentado un proyecto muy similar, el Plan Recorre en el que la Comunidad de Madrid invertirá 28,8 millones de euros de los Fondos Europeos para habilitar 23 corredores sobre vías pecuarias para conectar espacios de la Red Natura 2000.
Las vías pecuarias, tal y como recoge la legislación estatal y autonómica, tienen atribuidas la función medioambiental de corredores ecológicos, o biológicos, de conexión entre espacios naturales. No es necesario que ningún plan lo establezca.
Resulta innecesario incluirlas como soporte principal de caminos y corredores, cuando la propia red de vías pecuarias ya resulta una retícula que podría proporcionar esas mismas prestaciones ambientales, siempre, que se encontrasen en un estado aceptable, en cuanto a su integridad y conservación. Su potencial como corredor o conector viene determinado por su anchura (llegando a alcanzar los 75 metros de ancho en el caso de las cañadas reales) frente a otro tipo de caminos. Sin embargo, a día de hoy, al menos, el 38 % de los 1.400 kilómetros de vías pecuarias con las que contaba la región, ha desaparecido de forma irreversible. Además, la Consejería de Medio Ambiente va permitiendo su degradación paulatina al autorizar anualmente decenas de ocupaciones temporales.
Durante las primeras actuaciones del llamado Arco Verde, Ecologistas en Acción denunció la pasividad de la administración ante la usurpación de parte de estos caminos por la actividad agrícola. Fue el caso concreto de la Vereda de Barajas a San Sebastián de los Reyes. Resulta inconcebible que se asuma pasivamente que unos particulares colindantes puedan apropiarse de lo que a toda la ciudadanía pertenece sin recibir el más mínimo reproche.
Los 13 millones presupuestados para el Proyecto Arco Verde y los 28,8 millones de los Fondos Europeos que invertirá la Comunidad de Madrid, supondrán un despilfarro en unos proyectos de dudosa viabilidad ambiental que utilizan unas vías pecuarias disminuidas, mutiladas, estrechadas y en franca decadencia que se encuentran muy lejos de ofrecer el total de sus potencialidades.
Por ello, Ecologistas en Acción solicita a la Comunidad de Madrid que se reformen los citados proyectos en lo referido a las vías pecuarias, dedicando los recursos disponibles a la aplicación de la legislación que las defiende y regulan. A juicio de la organización, sobran las rimbombantes denominaciones que han buscado para esos proyectos, cuando lo que habría que hacer es cumplir con las obligaciones que establece la Ley de Vías Pecuaria de la Comunidad de Madrid:
- Finalizar los procedimientos administrativos de clasificación, deslinde y amojonamiento, única garantía para conservar la integridad y funcionalidad de la Red de Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid..
- Recuperar las vías pecuarias usurpadas y las que están ocupadas en la mayor parte de su anchura.
- Retirar las cientos de toneladas de vertidos que las convierten en basureros. Por ejemplo, la Colada del Santísimo, en Vallecas (Madrid) soporta 5 kilómetros de vertidos de todo tipo.
- Restaurar la cubierta vegetal propia de las vías pecuarias de cada zona natural de la Comunidad de Madrid.
- Garantizar la seguridad de los usuarios impidiendo actividades incompatibles y de alto riesgo como la circulación de vehículos a motor no autorizados y la caza.
- Promover la ganadería extensiva que pueda desplazarse sin problemas por la red de vías pecuarias y habilitar las infraestructuras anexas (abrevaderos, construcciones de guarda de ganado, etc) por toda la región
Junto a este conjunto de propuestas, Ecologistas en Acción reclama a la Comunidad de Madrid que considere la firma de convenios de colaboración con los municipios que así lo soliciten. Esta posibilidad viene recogida en la Ley de Vías Pecuarias de la Comunidad de Madrid. Sin embargo, 23 años después de su aprobación permanece inédita. Igualmente, la organización lleva años reclamando la declaración, como Vías de Interés Natural, de todas las vías pecuarias, o tramos de ellas, que discurren dentro de los límites de los espacios naturales protegidos, que son precisamente, las que puedan servir para preservar o conectar entre sí los espacios naturales de la Comunidad.
No resulta creíble que una Administración como la Comunidad de Madrid que destina a la Red de Vías Pecuarias una partida presupuestaria irrisoria y una dotación de personal muy insuficiente, tenga un interés genuino en los fines que se proclaman en los proyectos citados